Autor: plazueladelosparaisos

PLAZUELA DE LOS PARAISOS

PLAZUELA DE LOS PARAISOS

Este nuevo espacio urbano es consecuencia de la materialización del PGOU de Dos Hermanas del año 2002, a través de la actuación viaria AV-57 y de la demolición parcial de los edificios precedentes.

Aparentemente y desde tiempo inmemorial (según algunos escritos), este lugar pudiera llamarse «Plazuela de los Paraísos», y no es descabellado pensar que se tratase de un antiguo descansadero de uno de los caminos reales que enlazaban Sevilla y Jerez.

Así mismo estas antiguas construcciones pueden ser de la antigua Hacienda de la Mina Chica, en los archivos municipales existen algunas referencias:

  • En sesión de 9 de junio de 1911 (f20), los Sres «Gómez Varela y Cía», piden línea para reconstruir el muro del almacén denominado «Casa de la Mina» de su propiedad que está en el callejón que conduce a la calle Ntra. Sra. del Carmen.
  • En sesión de 19 de febrero de 1930 (f.60 vto) se indica que el espacio existente delante de la casa numero 2 de esta calle se denomina «Plazuela de los Paraísos» que los mas viejos del lugar dicen que es plaza desde tiempo inmemorial.
  • El numero 2 de la calle era la Casa Palacio del Duque de Fernán Núñez, conocida como «La Mina Chica», que fue inmortalizada en la revista Blanco y Negro (1920) por el pintor Ángel Díaz Huertas.

Así pues, podemos desprender que estas edificaciones precedentes la constituían dependencias de la antigua hacienda de la Mina Chica, que paso por Casa del Diezmo, Almacén de grano, fábrica de tejidos de yute, posada, y recientemente Albergue para viandantes.

En un principio, la actuación viaria AV-57, tenía prevista la demolición de todas las edificaciones a excepción de la torre, sin embargo y tras el estudio de las edificaciones previo a su demolición, se comprueba la existencia de varios elementos arquitectónicos de interés.

Junto a la torre, la existencia de una cornisa con la inscripción ANNO DOMINI MDCCLXXXI y un azulejo con la imagen de la Virgen de los Dolores (que aparecen mas arriba).

CIMG1290

La existencia, en el mismo lugar junto a la torre, de un arco interior de acceso a las antiguas dependencias del albergue, junto con una serie de arcadas de ladrillo sobre unas ventanas de un muro interior (en las que posteriormente aparecería una pequeña columna compuesta por tres piezas).

CIMG1446

La configuración arquitectónica de otras edificaciones similares

san jose de buena vista

entradazafra

Y fundamentalmente la existencia de una fotografía realizada sobre los años 50 en ese mismo lugar, que nos descubre la existencia de un antiguo arco de entrada a la primitiva hacienda, parcialmente oculto por la ejecución de un cerramiento que lo tabica.

Torre del Olivar y portada hacia 1954

Para esta intervención se ha tenido muy en cuenta la carga histórica del lugar, por lo que se creyó conveniente realizar una ANALISIS HISTÓRICO de los documentos o escritos que puedieran arrojar alguna luz sobre la arquitectura del lugar en épocas pasadas.

CECILIA BÖHL DE FABER (FERNÁN CABALLERO) Y SU DESCRIPCIÓN DE DOS HERMANAS.

HaciendaSanJoseM

Las narraciones de Fernán Caballero (Cecilia Böhl de Faver), nos describen algunos lugares de la Dos Hermanas de mediados del siglo XIX y nos dan ciertas «pistas», sobre el estado de su «arquitectura».
Según Rafael M. López Márquez en su libro «Dos Hermanas y Fernán Caballero: la suave paz del campo», Fernán Caballero se instalaría en la hacienda de la Mina Chica, una de las propiedades que el marques de Arco Hermoso, marido de Cecilia, poseía en Dos Hermanas, según Daniel Pineda Novo «Dos Hermanas en la obra de Fernán Caballero, 1977, p 81». Y también se la ubica en una de las casas que poseía el marques en la calle Canónigo.
El contacto con Dos Hermanas se interrumpe en 1935, a la muerte del marques.
Las obras que describen Dos Hermanas, entre otras, son: La familia de Alvareda; la trama central de Una en otra; algunas descripciones de Clemencia o Elia; Promesa de un soldado a la Virgen del Carmen; Los dos memoriales; El sochantre del lugar (en el que Dos Hermanas se describe bajo el nombre de Valdepaz).

CECILIA
En su obra «La familia de Alváreda» nos describe la zona trasera de la iglesia de Sta. María Magdalena, allí nos dice existe un arco a través del cual se pasa a una patio o jardín, en donde además de árboles frutales, existe una parra, en concreto nos narra: “El pueblo se compone de algunas calles anchas, formadas por casas de un solo piso, labradas en cansadas líneas rectas sin ser paralelas, que desembocan en una gran plaza arenisca, extendida como una alfombra amarilla ante una hermosa iglesia, que levanta su alta torre coronada de una cruz,… A espaldas de la iglesia encontrareis el oasis de este estéril conjunto. Apoyada en el muro de detrás de la iglesia, se halla una gran puerta que da entrada a un vasto y dilatado patio, que precede a la capilla de Santa Ana… junto a la capilla, apoyada en ella, está la pequeña y humilde casita de su guarda…En el patio veréis cipreses centenarios, sombríos y reconcentrados; el alegre y loco paraíso…; el naranjo…;veréis una parra….A derecha e izquierda del lugar se extienden aquellos interminables olivares… De trecho en trecho se encuentra el caserío de la hacienda a que respectivamente pertenecen. Están estas labradas sin gusto ni simetría, y se les dá la vuelta sin atinar a descubrir la fachada. Nada tienen de grandioso estas grandes moles o fábricas, sino las torres de sus molinos. Estas haciendas pertenecen en lo general a la aristocracia de Sevilla; pero por lo regular no son habitadas, por no gustar las señoras del campo….”

En “El sochantre del lugar”, titula a Dos Hermanas como Valdepaz y escribe…La hacienda en que habitábamos solo estaba separada del cementerio por un pequeño corralón en que pacían las ovejas…. Cuando veía abrir una zanja por los parientes de una persona difunta (puesto que allí no hay enterradores asalariados), lejos de ver en ellos hombres lúgubres cavando una negra y pavorosa sepultura para un muerto, solo me parecían hermanos de la caridad preparando un lecho para un dormido. (El cementerio del lugar está pegado a la iglesia. La hacienda de la Mina Chica, propiedad del Marques de Arco Hermoso, se sitúa junto a la iglesia, y por tanto muy cerca del cementerio)….Agregó a la dignidad de sochantre la de sacristán y santero de una capilla situada a espaldas de la iglesia, (Junto a la parroquia de Santa María Magdalena se ubica la ermita o capilla de Santa Ana: “El templo de la patrona fue construido muy probablemente a finales del s. XIV y fue la única iglesia que hubo en Dos Hermanas hasta los primeros años del siglo XVI [Barbero Rodríguez, J. Historia de la Hermandad de Señora Santa Ana, Patrona de Dos Hermanas (1517-1900), Dos Hermanas, 2012 p. 150])….la que tenia contigua una casa-habitación para el encargado de su custodia. (La casa habitación del santero estaba precedida por un jardín, hoy desaparecido, en el que se encontraban árboles, plantas y varias especies florales, e incluso un pozo. Lindaba al norte con el cementerio). Casose con una sobrina del cura…(santera en la capilla de Santa Ana, mujer del sacristán y sochantre de la iglesia). La pequeña casa en que vivía con su excelente y amante mujer y una sobrinita huérfana que había prohijado…..estaba situada, con la capilla, entre la iglesia y nuestra hacienda: a la espalda tenía el alegre cementerio…(De nuevo, Fernán Caballero nos deja una pista de su estancia en la hacienda de la Mina Chica, única que coincide con estas descripciones). Para llegar a la habitación del sochantre se atravesaba un gran corralón o patio verde y frondoso, que servia a la capilla y a la casa como antesala. Crecían en su centro dos altos cipreses, a un lado dos anchos naranjos y entre estos y los primeros se hacia lugar un alegre paraíso, acariciando al naranjo con sus ramas, perfumando al ciprés con sus flores….Al frente de la casa se arrellanaba, brindando sombra, una parra recostada en su emparrado, sostenido por picatos….(y continua describiendo las diversas especies florales rusticas; la tremenda boca de sapo; el desgabilado jaramago; un rosal de pasión; una madreselva; la adelfa; el delgado aromo, salpicado de lentejuelas de oro; la alhucema; el saúco; las viuditas jóvenes; los frailes boca abajo; la tiesa malva loca; los inofensivos alfileres; las lindas y finas arañas; el moco de pavo, revestidos de unas buenas púas; los miramelindos; el mirasol o gigantillo; sangre de franceses; la capa de rey; los nunca me dejes; flor de Santa María; las arreboleras o suspiros o periquitos de noche y por último las adormideras)….mientras que volviendo la cara hacia el patio, en cuya resplandeciente y embalsamada atmosfera formaban los cipreses, los naranjos y las flores como fondo en medio del cual se destacaba la capilla con su lámpara perennemente encendida ante la antigua y milagrosa imagen que orlaban los exvotos de los fieles….

OTRAS OBRAS DESCRIPTIVAS DE LA DOS HERMANAS DE LA ÉPOCA.
De esta misma época, 1864, es la publicación de la “Guía del Viagero por el Ferro-Carril de Sevilla a Cádiz” (sic) con láminas litografiadas. Obra publicada bajo los auspicios del Consejo de Administración de la línea y escrita por D. Eduardo Anton Rodríguez, en la que se describen las poblaciones por las que atraviesa la referida línea ferroviaria. En su apartado dedicado a Dos Hermanas, escribe:
“Tiene esta villa 1.400 vecinos, (si bien en la misma obra y en un cuadro destinado al censo de las poblaciones sobre el trayecto, refiere 5.000 habitantes) repartidos en 950 casas, 24 calles y 2 plazas, una bonita iglesia parroquial, restaurada y elegantemente adornada por los Sres Golleneta de Sevilla, tres ermitas, una modesta casa consistorial, dos escuelas de niñas y dos de niños. De estas una es pública y otra particular, asistiendo 120 alumnos a la primera y unos 30 a la segunda: la misma diferencia existe entre las dos de niñas que cuentan 85 la pública y 30 la particular. El aspecto de la población ha mejorado mucho en los últimos años: las primitivas construcciones cubiertas de retama, verdadero símbolo del progreso en arquitectura, porque presentan el último esfuerzo de la choza para convertirse en casa, van desapareciendo de dia en dia, dejando su lugar a las lindas habitaciones de nuestra época. Todavía se ven en las desiguales calles de este pueblo algunas viviendas, cuyo negruzco techo de ramaje nos causo el mismo efecto que las canas de un anciano, porque ellas han dado el ser á las modernas casas que se alzan a su lado. El estado de las calles es bastante lastimoso: no solo están sin empedrar, sino que en su mayor parte ofrecen grave peligro al viajero que intente atravesarlas de noche por hallarse llenas de barrancos y eminencias que hacen absolutamente imposible su tránsito…
En la parte posterior de la iglesia parroquial, detrás del altar mayor, se encuentra una preciosa capilla dedicada a Nuestra Señora Santa Ana… En el patio de la capilla hay un pozo, cuya agua, a semejanza de la de San Isidro de Madrid, dicen que cura las calenturas.
El cementerio de la villa está pegado a la iglesia, y hallándose esta en la plaza mayor, aparece a los ojos del viajero un fenómeno raro por su originalidad y que pudiera pasar por un epigrama en los tiempos que alcanzamos: el cementerio en la plaza de la Constitución, ó lo que es lo mismo, la Constitución en la fosa.
El terreno del término de Dos Hermanas es en su mayor parte arenoso y calizo…La industria está reducida a 36 molinos de aceite y a dos soberbias canteras de 16 aranzadas cuadradas (una aranzada equivale a 4.755,7799 m2 de conformidad con la real orden del 9 de diciembre de 1852, publicada en la «Gaceta» de Madrid el 28 de dicho mes y año) la una y 3 la otra, próximas a la población, que dan abundante piedra para construcciones. De ellas ha sido extraída toda la que se ha empleado en las obras de la fábrica de la sección de la línea comprendida entre Sevilla y Jerez”.

DOS HERMANAS A PRINCIPIOS DEL S. XX
En el documento PLANOS DE ALINEACIONES DE CALLES realizado por la Sección de Obras Públicas del Ayuntamiento de la Villa de Dos Hermanas, en 1.902, encontramos los planos correspondientes a la calle Conde de Ybarra (actual Real Utrera) y calle Santa Ana, en cuya confluencia se ubican las edificaciones estudiadas.
En el plano correspondiente a la calle Conde Ybarra, las edificaciones estudiadas se rotulan como Casa del Diezmo (las correspondientes a los nº 7, 9 y 11 actuales) y Parador de Sta. Ana (correspondiente a los nº 1, 3 y 5 actuales) y se propone para ellas y para el resto de los números impares una nueva alineación.

Conde de Ybarra-2

Se aprecia también la existencia de un cerramiento trasero a la iglesia parroquial en donde existe una entrada amplia que da acceso a la Capilla de Santa Ana, o al patio que la precede, que bien pudiera tratarse del muro y de la ancha puerta que describe Fernán Caballero en sus obras. En ese momento el ancho de la calle Santa Ana es de unos 3 metros, siendo hoy de unos 5,50 metros, lo que puede explicar las amplias dimensiones del anterior patio, narradas por la autora en sus obras.

En el plano correspondiente a la calle Santa Ana, encontramos la referencia de una finca, rotulada como Casa de la Mina, que bien pudiera tratarse por su ubicación, de la casa señorial de la hacienda de la Mina Chica, ya que esta cumpliría con parte de las descripciones que de ella se hace,“su erguida fachada de piedra y hierro y su gran pórtico coronado con las armas de sus dueños” ó “al exterior muchas ventanas con sombra de hierro y falta de cristales, alistadas en fila…. y un enorme balcón sobre una gran puerta, coronado con las armas in-folio de la familia”, por lo que no se corresponde, a mi entender, ni con la situación ni con la imagen actual de lo que hoy conocemos por la hacienda de la Mina Chica

Sta Ana

EL PROYECTO.

Así pues, y tras estas consideraciones, y por el interés arquitectónico y tipológico de las referidas construcciones se decide su mantenimiento y restauración junto con el de la propia torre que se recoge en el PGOU y que forman parte del espacio público que se ha configurado.

Contagiados del espíritu romántico de los escritos de Cecilia, se ha intentado configurar (con mayor o menor acierto) un espacio público que al mismo tiempo que orienta al espectador hacia la ermita de Santa Ana, recoja en alguna medida ese jardín que la escritora nos narra y que encontró tras la iglesia de Santa María Magdalena allá por 1825 ….

En este aparecen los elementos narrados; el ciprés, como elemento orientador hacia la torre; el naranjo, que nos hará disfrutar de su olor en tiempos de primavera; las vigas del emparrado, en nuestro caso que acodalan los arcos; la enredadera que trepará por los vetustos muros……… y el alegre paraíso, que nos alegrará con sus flores!

VISION FINAL

Bibliografía:
Eduardo Anton Rodríguez. 1864. GUIA DEL VIAGERO POR EL FERRO-CARRIL DE SEVILLA A CADIZ con láminas litografiadas que representan las vistas de las poblaciones de la línea y descripción e historia de todos sus pueblos hasta Cádiz. Consejo de Administración de la Línea.
José Mª Gómez Sánchez. 1977. “Recuerdos al Viento”. FERNAN CABALLERO (1796-1996) Excmo. Ayuntamiento de Dos Hermanas.
Pedro Sánchez Núñez. 1.999. HOMENAJE A LA ESCRITORA CECILIA BÖHL DE FABER (FERNAN CABALLERO) CON MOTIVO DEL TRASLADO DE SUS RESTOS AL PANTEÓN DE SEVILLANOS ILUSTRES.
Rafael M. López Márquez. 2011. DOS HERMANAS Y FERNAN CABALLERO: LA SUAVE PAZ DEL CAMPO (Recopilación de textos nazarenos). Asociación cultural “La Plazoleta de Valme”.